El equilibrio. En una buena guitarra como en un buen vino, ésta sería sin duda la cualidad más importante: el equilibrio. ¿Cómo integrar elementos con tanto carácter como una roseta de perla en relieve que roza la categoría de joya real, un juego de palosanto de los que te hacen suspirar, un puente grabado con láser y unos clavijeros de perla negra hasta conseguir que todo sea un único instrumento en perfecta armonía? Te lo cuento a continuación... ¿Una copita de vino mientras lo lees?
"Como la tinta de Toro. La guitarra Toresana con denominación de origen"
EQUILIBRIO
Como el buen vino presenta primero su vista, así lo hace esta guitarra. Vas a identificar inmediatamente los detalles principales, pero poco a poco te va dejando ver los pequeños matices que serán los que a la larga marquen la diferencia. A simple primera vista ya sabes que esta guitarra no te va a dejar indiferente. Pero será en los pequeños matices donde realmente encuentres la artesanía de este instrumento.
ALESSI EDICIÓN ESPECIAL
El Maestro Alessi está considerado como uno de los mejores artesanos de clavijeros del mundo. Exclusivamente hechos para esta guitarra con motivos de uvas y parras tallados a mano, botones de perla negra maciza y para detalle final, el contorno de la cabeza tallado en la misma pletina del clavijero. Sistema patentado anti holguras y rodamientos en los bujes. Pero sin duda, lo que los convierte en una maravilla, es que pasan casi desapercibidos en el instrumento, totalmente integrados en él... hasta que los ves.
A simple vista parece un puente normal, hasta que te acercas...
Detalle del cordal del puente, grabado con láser.
GEOMETRÍA FLAMENCA
Podría pasar por una guitarra clásica, pero su geometría revela el verdadero carácter de esta guitarra flamenca negra de concierto. Ya te has dado cuenta que la cejuela es negra y está forrada de perla negra, ¿verdad?
FONDO
No es necesario hacer ningún comentario sobre el fondo. Te dejo que disfrutes de la foto.
LA ROSETA TORESANA
Completamente hecha de perla maciza, con tres tonalidades como los tres vinos de Toro. Perla blanca de Nueva Zelanda, perla rosada de Korea, y negra de Taití. Es como el buen vino que te deja con ganas de otro sorbo más, la luz y el volumen de esta roseta te invitan a echar una mirada más.
